lunes, 8 de febrero de 2010

Lo mejor de la semana: "Castaway on the moon"




Esta semana ha venido cargada de títulos, he tenido la suerte (y el tiempo) de poder ver cosas muy variadas.

Empecé la semana con "Sherlock Holmes" (USA 2009), lo último de Guy Ritchie. Tenía mis reservas porque admiro una parte de la carrera de Ritchie (a pesar de haber estado casado con la petarda de Madonna) y no sabía si este tipo de película iba a encajar con su estilo. Reconozco que me gustó bastante, es fresca, entretenida y con una trama bastante dinámica. Eso ya lo tiene Ritchie, que es complicado aburrirse en sus películas. Downey Jr. lo borda y, aunque al principio cuesta ver a un Watson que vacila y se enrolla con las tias buenas, el toque chulesco de Jude Law no está del todo mal.

"Cruzando el puente: los sonidos de Estambul" (Alemania 2005) es un documental que explora los diferentes sonidos y músicas que se crean en Estambul. A pesar de ser de 2005, da la sensación de estar viendo imágenes de los años 70 u 80. Pequé queriendo encontrar más una guía de la ciudad que otra cosa y me encontré con lo que es en realidad: un documental sobre música.

El cine asiático, dejando de lado el japonés, chino y surcoreano, es un gran desconocido en Europa. Países como Malasia, Filipinas (con mucha tradición europea y, en concreto, española), Taiwan, Mongolia, etc. tienen propuestas muy interesantes. Uno de los directores más conocidos en Malasia es James Lee, que rodó una especie de trilogía formada por "The beautiful washing machine", "Before we fall in love again" y "Things we do when we fall in love" (2007), que es la que he visto de momento. Pendientes quedan las otras dos. Me esperaba cine independiente cumplidor y efectista pero me encontré minimalismo asiático puro y duro. Largas escenas sin diálogo, metraje y más metraje de momentos cotidianos, poco montaje y cambio de planos. Puede resultar aburrida para nosotros, acostumbrados al ritmo del cine occidental. De todas maneras no está mal echarle un ojo a este cine, por comprovar el cambio en el estilo que, supongo porque no soy un experto, puede reflejar las diferencias culturales entre occidente y Asia.

La peli española de la semana: "After" (2009), de Alberto Rodríguez, con Guillermo Toledo, Tristán Ulloa y Blanca Romero como protas. Un trío de amigos que se reunen de nuevo para pasar una noche juntos de fiesta. A la película la salva el montaje, original, que te lleva de un momento a otro cronológicamente para que notes el choque de contrastes entre las vidas convencionales que llevan y la locura de la noche. Lástima que en algún momento parezca pretenciosa. Lo mejor: la actuación de los tres.

"Tiana y el sapo" (USA 2009) es la nueva película de Disney, con la que vuelve a sus orígenes en 2D con una historia de lo más típica a nivel de personajes. Musker y Clements, los directores, son autores de "La sirenita" o "Aladin" entre otras, es decir, pesos pesados en la historia de Disney. Su intención ha sido adaptar la película a los tiempos modernos utilizando un estilo antiguo (incluso los dibujos parecen más antiguos que "Aladin" o "La bella y la bestia" intencionadamente). Como todas las pelis Disney, la película es como un manual del comportamiento femenino en el siglo XXI. Ahora la prota no es princesa, ni rica, ni hija de un sultán, ni quiere enrollarse con un moro pobre, ladrón y que vive con un mono por afán travieso. Ahora es NEGRA, pobre y no para de repetir en toda la película cuánto ha de trabajar uno para conseguir lo que quiere. Para mi gusto, la película no aporta nada absolutamente (a parte de esos cambios modernos), sigue anclada en el pasado, los dibujos parecen recuperados de algún armario con bocetos antiguos y no tiene ritmo. La salva las canciones a ritmo de jazz de Nueva Orleans de Randy Newman, todo un acierto.

"El alma de la roja" (España 2009) es un documentalillo simplón de Santiago Zannou, el director de "El truco del manco". Se centra en la selección española de futbol, sus éxitos y fracasos a través de los 100 años de vida. Mezcla entrevistas con jugadores y entrenadores de todas las épocas con imágenes de archivo.

"Peter and Vandy" (USA 2009) es una película de esas del cine independiente americano moderno. Poco presupuesto, historia de amor, 2 protagonistas (chico / chica) y una originalidad: cuando no lo es el argumento, se puede echar mano de otros recursos como el montaje en este caso (algo parecido a lo que pasa con "500 días juntos). La cinta mezcla momentos diferentes en la relación de los 2 protagonistas. No está mal para el que quiera ver una película romántica, que tiene poco de comedia, pero no es la típica pastelona. Muy al estilo "Buscando un beso a medianoche" o "Antes del amanecer".

"Youth in revolt" (USA 2009) entraría en el saco de comedias adolescentes aunque un poco con calzador, porque no es la TÍPICA comedia de adolescentes extrahormonados o retrasados mentales. Michael Cera lo hace muy bien (el chico de "Juno").

"Las alucinantes aventuras de Bill y Ted" (USA 1989) es una comedia ochentera con toques de "Regreso al Futuro" y "Colega, dónde está mi coche". En ella aparece un Keanu Reeves super joven que interpreta un adolescente pasota obsesionado con la música. Junto a su colega inseparable, tienen una banda de rock aunque ni siquiera saben tocar la guitarra. Es la época del metal de Bon Jovi, Van Halen y compañía. La película se nota que está hecha con ese mensaje oculto al estilo "Noche en el museo" del rollo: estudiar también puede ser divertido. De todas maneras, es toda una chorrada de película, aunque te ríes en alguna escena de lo tontos que son.


LO MEJOR DE LA SEMANA: "Castaway on the moon"


Llevo mucho escribiendo así que no me quiero explayar demasiado. "Castaway on the moon" (Corea del Sur 2009) es, sin duda, lo mejor que he visto no solo esta semana, sino en lo que va de año. Se trata de una especie de comedia en la que el protagonista, un hombre al que han echado del trabajo y está de deudas hasta arriba, decide tirarse de un puente. Para su sorpresa, no muere sino que es arrastrado hasta una isla desierta. En realidad, se trata de una isla en mitad del rio que pasa por la ciudad, es decir, que desde allí ve todos los rascacielos pero nadie le ve a él. No consigue contactar con el móvil así que se convierte en náufrago. Hasta aquí tiene gracia. Pero más que un recurso original es una manera de redimirse de sus problemas, de encontrarse a sí mismo y de escapar del mundo moderno y occidental (trabajo, obligaciones, tarjetas de crédito, deudas...). Sus obligaciones se convierten en las esenciales para sobrevivir como son buscar comida y cobijo.

Toda una recomendación para todo tipo de público: el que busque entretenimiento, el que busque diversión, el que busque drama, el que busque una historia de amor. Dos de las mejores horas invertidas en cine en mucho tiempo.

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